Ruta por las calas de Begur

Fresquito fresquito y aprovechando que hoy es fiesta en Barcelona y tengo el día libre, escribo lo que hemos hecho este fin de semana, que de nuevo montamos las cosas de camping y nos fuimos a conocer rincones de Cataluña. No pudimos ir a los Pirineos, esta vez por falta de tiempo, pero también por lluvia en las montañas. Así que escogimos un destino supuestamente relax, pasar un fin de semana por las calas de Begur. Encantados, ya que la última vez que cambiamos por la Garrotxa terminamos muy contentos.

Ruta de 15 km por las calas de Begur.

Para nuestra sorpresa, cuando nos ponemos a informarnos sobre el destino (cuando íbamos de camino) vemos que hay una ruta por las calas de Begur. Por lo cual nuestro fin de semana de relax por calitas paradisíacas, se transforma y pasa a ser un finde de ruta que dicen ser dura por la costa. ¡Pero vaya si ha merecido la pena tener las agujetas que hoy tengo en el culo y en los gemelos! Os cuento un poquito más…

Llegamos el viernes al Camping Begur, un camping que nos recomendó un amigo y que está súper bien. Es inmenso, acampas bajo pinos, lo que hace que parezca que estás en pleno bosque. Tiene dos piscinas muy grandes, una de ellas climatizada(pero al aire libre), bar, supermercado y zona de entretenimiento para los más pequeños. Nos costó la parcela sin luz, coche y tienda para dos personas 24€ la noche e temporada baja (justo la semana siguiente empezaba la temporada alta, así que fuimos suertudos) Solo por sacarle una pega, los baños, las duchas no eran cerradas totalmente, eran en plan cabaña, por lo que en invierno imagino que se pasará un poquito de frío por mucha agua caliente que se use.

A la mañana siguiente comenzamos nuestra ruta desde el camping, ya que pasa por al lado y así podíamos dejar el coche en el camping. La realizamos al contrario, ya que la ruta comienza en el parking de Begur, y nosotros por ahí fue por donde terminamos. Porque queríamos dejar Begur para el final de la tarde y dar una vueltecita por el pueblo que era el fin de semana de las flores.

He de decir que la ruta es duriya, ya que vas por la costa, los acantilados, y bajadas a la playa, lo que supone subida y bajada constante, algunas de ellas más duras de la cuenta (de ahí mis agujetas el día de después).
Tiene mucho camino también por barrios residenciales en los cuales quedarás alucinado de las casas que tiene la gente por allí, y soñarás (o al menos yo lo hice) con cómo sería tener una casa de esas con esas vistas y una piscina con una pared de cristal (sí, para ver el mar de lejos mientras buceas, cosas que por lo menos a mi se me escapan).

La primera playa que te encuentas es la cala de Aiguablava, ¡una pasada! yo me hubiese quedado ahí ya todo el día buceando, pero la misión era terminar la ruta, y así hicimos.

Justo por un sendero súper agradable llegas a la otra cala, la Cala Port d’Esclayá, y por este seguirás hasta cala ‘en Malaret, Cala de Ses Orats y Cala n’Estasia.

Por la cala de Playa Fonda pasarás pero no es obligatorio(dentro de la ruta) bajar, pero como era el principio de la ruta y yo me sentía con fuerzas, le dije a Jaime que bajásemos, a lo que el me dijo: «Marian, nos queda aun mucha ruta por recorrer, ¿estás segura?» Y yo como siempre que no veo lo duro que podrá ser la ruta en el futuro contesté con un rotundo «sí». Pero es taaaan linda que volvería a bajar (ahí lo dejo a vuestra elección)

Después de esto viene lo duro, te metes en plena montaña a subir rodeada de matorrales y pinos, unas vistas preciosas, pero un poco de escalada (no técnica, pero sí escalada), cuenta que también nos daba todo el solano en la cabeza y lo hacía más duro aún.

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Si haces la ruta, no se te olvide llevarte bastante agua (nosotros llevábamos 3 litros, pero también podrás comprar en los chiringuitos que te encuentres por el camino) Además de comida y algún que otro snack o fruta para el camino.

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Durante todo este trayecto no verás más calas ni playas, solo miradores y vistas preciosas hasta que llegues a Sa Tuna.

Justo después, como habíamos descansado y nos sentíamos con fuerzas, (fuerzas falsas momentáneas) hubo un momento en el que nos pensamos enlazar la ruta roja (ver mapa) con la verde, y alargarla un poco más. ¡Menos mal que no lo hicimos! Porque como ya os he dicho, eran falsas fuerzas momentáneas, ya que lo que vino después eran más subidas (yo pensaba que Begur estaba en el cielo o algo) hasta llegar a Begur. Aquí volvimos a parar a tomar una coca cola y disfrutar un poco del pueblo en flor.

Y vuelta al camping donde terminamos nuestra ruta y nos metimos un plataco de pasta con berberecho y pulpo (todo en lata) entre pecho y espalda.

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Notas:

• Ruta circular
• 15 km
• Dificultad: media, alta si hace mucha calor
• Duración: unas cinco horas con paradas de fotos incluidas (no paradas de relax)
• Recomendaciones: llevar gorra, mucha agua y comida para el camino.
• Recomendación extra: ¡¡bañador y gafas de bucear!!

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Al día siguiente para terminar nuestro fin de semana en Begur decidimos ir a pasar el día por las playas de Begur por las que no habíamos pasado: Sa Riera y Racó. Pero de todas las playas de Begur os hablaré en otro post.

¿Os animáis a hacer la ruta? ¡Contádnos qué tal!